1. Revierte el síndrome metabólico:
Los últimos estudios han comprobado la eficacia de la dieta mediterránea en la prevención primaria de enfermedades cardiovasculares. Según los expertos, añadir frutos secos y aceite de oliva en nuestra alimentación diaria disminuye la obesidad abdominal y los niveles de glucosa en sangre, dos indicadores de la presencia de síndrome metabólico que sufre el 25% de los adultos españoles y que consiste en alteraciones del metabolismo, como presión arterial alta, niveles bajos de colesterol HDL ─conocido como colesterol bueno─, niveles altos de triglicéridos y altas concentraciones de azúcar en la sangre.
2. Trata úlceras por presión:
Expertos aseguran que los beneficios del zumo de la aceituna en la salud están comprobados. «El aceite de oliva se emplea aún hoy en día para numerosas asistencias sanitarias. Una de esas utilidades es tratar con aceite las úlceras por presión». Estas lesiones repercuten negativamente en la salud y calidad de vida de quienes las padecen, principalmente la población mayor y/o inmovilizada.
3. Potencia el colesterol bueno:
Los efectos protectores del aceite de oliva extra contra enfermedades asociadas al estrés oxidativo como las cardiovasculares, las neurodegenerativas o el cáncer se atribuían hasta ahora a su alto contenido de ácidos grasos monoinsaturados. Por eso, el proyecto financiado con fondos europeos Eurolive estudió la posibilidad de que otros factores químicos también contribuyan a los beneficios documentados del aceite de oliva para la salud. Los resultados mostraron que a mayor contenido de polifenoles, mayor era el nivel de HDL, el también llamado colesterol bueno. La sustitución de grasas saturadas por grasas instauradas en la dieta contribuye a mantener niveles normales de colesterol sanguíneo. El ácido oleico es una grasa instaurada. El ácido oleico es un componente fundamental de los aceites de oliva (entre el 55% y el 83% de su composición de ácidos grasos)
4. Evita problemas gastroduodenales:
El aceite de oliva forma una película alrededor del estómago y del duodeno previniendo la formación de úlceras. Para su curación, hay que usar fármacos como el Omeprazol, pero muchos médicos recomiendan consumir a su vez aceite de oliva virgen extra, dado su contenido en vitaminas liposolubles E y A, y por ser el aceite de oliva su vehículo de transporte dentro del organismo.
5. Aliado contra el cáncer de mama:
Investigadores de la Universidad de Granada y de Málaga han utilizado aceite de oliva para obtener nanocápsulas que han mostrado su eficacia para combatir células afectadas por cáncer de mama, reduciendo los daños en las células sanas del paciente. Estas cápsulas microscópicas actúan como vehículos transportadores para administrar fármacos a líneas celulares tumorales y son selectivas, ya que actúan preferentemente en las células cancerígenas.
6. Hidrata la piel:
Aunque para tener una buena piel los dermatólogos recomiendan usar una buena crema hidratante y beber mucha agua, el aceite de oliva se revela como uno de los mejores humectantes naturales para la piel. Este producto es una excelente alternativa que permite hidratar la piel en profundidad, suavizarla, prevenirla del envejecimiento prematuro y protegerla de las agresiones generadas por los rayos solares.